lunes, 17 de julio de 2017

Modulo 2 Semana 4 - Proyecto Integrador "De la información al conocimiento"

Puedes descargar la actividad completa haciendo click aquí.

De la información al conocimiento


Mi Reseña

Alto al dolor

Guerrero Mothelet, Verónica. Alto al dolor. Revista ¿Cómo ves? Número 150. http://www.comoves.unam.mx/numeros/articulo/150/alto-al-dolor Consultada el 16 de octubre de 2014.


Reseña informativa

Dirigida al público en general que esté interesado en el tema



Elementos de identificación sobre el autor y el texto

Verónica Guerrero Mothelet es periodista y divulgadora de la ciencia, colabora en la revista ¿Cómo ves? De la UNAM y otras áreas de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia y es corresponsal ocasional para la revista Nature Biotechnology. En este reportaje el autor presenta de forma estructural el conocimiento que se tiene en cuanto al origen, desarrollo y alternativas de tratamiento para este mismo. Además, aborda a grandes rasgos los estudios que se realizan actualmente para encontrar la cura definitiva al dolor agudo y crónico.

Reseña

Actualmente se ha encontrado que nuestras creencias y emociones son esenciales en la percepción del dolor, lo cual es aprovechado por la psicología para ayudar a las personas que sufren de dolor crónico. El dolor se define como “una experiencia sensorial y emocional desagradable, asociada con una lesión hística real o potencial, o que se describe originada por dicha lesión”. El dolor físico es asimismo es una experiencia emocional por la sensación de desagrado que provoca.
El dolor se divide entre agudo y crónico; siendo la duración y los mecanismos fisiopatológicos que los generan los que los definen en sus diferentes grupos.
El dolor agudo es el que se origina por daños en tejidos o vísceras, o todo aquel que avisa de algún problema orgánico urgente; aunque este es muy molesto, por lo general desaparece con la lesión que lo provocó, tras cumplir su función de protección biológica. Mientras que el dolor crónico es todo aquel malestar que persiste por más de tres meses. Este por lo general conlleva a niveles elevados de alteraciones e incapacidad acumulada que se acompañan de estados emocionales negativos y una pobre calidad de vida.
A pesar que actualmente la tecnología aplicada a la biomedicina nos permite el acceso a medicamentos que controlan el dolor, estos solamente se limitan a aliviarlo en un 40%, según estudios realizados en la materia por Benjamín Domínguez Trejo, investigador de la Facultad de Psicología de la UNAM.  El resto del tratamiento depende de factores externos, conocidos como “factores contextuales” que están íntimamente ligados a situaciones emocionales y sociales que presenta el paciente. Uno de los factores claves para el alivio del dolor son las creencias del paciente, dado que estas tienen la posibilidad de ayudar o cancelar el alivio del dolor en el paciente. Otro factor importante es la confianza del paciente, ya que cuando esta es depositada en un médico o un medicamento, puede hacer realidad la creencia de que se curará del dolor mediante la predisposición afectiva.
Hoy en día contamos con alternativas psicológicas para el tratamiento del dolor, una de ella es la respuesta de relajación, en la cual un paciente con dolor crónico es capaz de producir cambios en su cerebro para reducir su nivel de estrés con el fin de mejorar. Otra alternativa es la analgesia hipnótica, la cual es una modalidad de la hipnosis que produce alivio al dolor simplemente cambiándole a este el significado.
Actualmente se investiga afondo sobre los analgésicos endógenos, que son los que produce nuestro cuerpo de forma natural. Uno de ellos es la oxitocina, hormona que se libera en el núcleo paraventricular del hipotálamo cerebral, de donde pasa al torrente sanguíneo. De acuerdo con estudios realizados por el doctor Miguel Condés-Lara, investigador del Departamento de Neurobiología del Desarrollo y Neurofisiología del Instituto de Neurobiología de la UNAM, dichas neurohormonas tienen un efecto analgésico real en las ratas. Actualmente trabajan en investigaciones para conocer la manera específica de su funcionamiento.

Conclusión

Esta reseña ilustra cómo se origina el dolor y como puede ser tratado, sin embargo hasta ahora las investigaciones demuestran que el cerebro puede entenderse a sí mismo y también puede contribuir a sanarse. La respuesta favorable de cualquier tipo de tratamiento que deseemos llevar a cabo depende en gran parte de los factores emocionales y sociales que el paciente experimente durante el malestar y su tratamiento.



Referencia bibliográfica

Guerrero Mothelet, Verónica. Alto al dolor. Revista ¿Cómo ves? Número 150. http://www.comoves.unam.mx/numeros/articulo/150/alto-al-dolor Consultada el 16 de octubre de 2014.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario